Había una vez un ladrón aficionado a robar colores. Sí, de verdad: un ladrón de ...
Había una vez un marciano que soñaba con ser paseador de estrellas. Todos los de...
Había una vez un libro mágico que no tenía fin. Durante generaciones, el libro p...
Hubo una vez tres compañeros de oficio que habían convenido correr el mundo junt...
En el vecindario de Teo vivían dos ancianos que llamaban la atención del niño. A...
El ratón Beto vivía en una gran ciudad. A Beto le gustaba pasearse por todos lad...
Era un día como cualquier otro en el jardín de flores. Los días de oruga habían ...
A Rodri le habían regalado una consola de videojuegos. Ese regalo había sido año...