Ana no quiere una hermanita
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Ana no quiere una hermanita

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Ana no quiere una hermanita Ana sale del colegio a las cinco de la tarde. Su cuidadora Elisa la recoge todos los días. Es una chica muy alegre y buena con Ana, pero aun así no es capaz de conseguir que la pequeña quite el mal gesto al entrar en casa y ver que su hermana Carmen ha llegado antes que ellas.

Carmen tiene tres años más y ya puede venir sola, porque va al instituto, y regresa a casa con sus amigos. Ana no tiene buena relación con ella. Está cansada de ser hermana de Doña Perfecta, como dice cada vez que habla de Carmen. Ana se acerca cuando está sola al cuarto de Carmen y ve desde la rendija de la puerta el escritorio de su hermana lleno de trofeos: unos de las olimpiadas matemáticas, otros por ganar en carreras de atletismo o por hacer buenos dibujos. ¡Qué rollo! ¿Por qué ella no era buena en nada?

En su diario habla mucho de las cosas que no le gustan de Carmen, esas que nadie ve, ni siquiera mamá parece verlas. Su hermana tiene una risa estridente, no sabe nada de pelis guays, es algo desordenada… pero parece que todo el mundo se fija en que es mucho más guapa, con sus trenzas rubias y sus ojos azules, que es buena estudiante y tiene un montón de amigos.

A veces sueña con que no tiene hermana y que es muy feliz, no comparte sus juguetes, sus padres solo hacen cosas para ella, la gente está pendiente de las cosas que le suceden, nadie la compara con nadie….pero luego se despierta y ya sabe que tiene que vivir con Carmen y su sombra.

Los días de otoño fueron pasando y una tarde mamá le dijo que Elisa se había puesto mala y que no podía ir a buscarla al cole. Como ellos tenían que trabajar y los abuelos estaban de viaje había pensado en que Carmen la fuera a buscar al cole y pasara la tarde con ella. Ana frunció el ceño, bajo la barbilla en señal de enfado y no contesto a mamá, pero a ella le dio igual. Desayunaron juntas y en eso quedaron. Carmen será su cuidadora por un día.

Cuando dieron las cinco Ana salió por la puerta y al lado de la verja grande estaba su hermana con una sonrisa y una mirada tranquila.

-¿Qué tal, peque? ¿Cómo fue el día? ¿Tienes muchos deberes?

Ana no quiso contestar. ¿Qué hacía hablándole como si fuera su amiga? Ana no quería serlo. Cerró sus labios y se puso a caminar.

-¿Estas enfadada? Pues nada, lo que tú quieras, pero ya verás cómo hoy pasamos una tarde divertida -contestó Carmen.

Ana siguió sin decir una sola palabra y caminaba delante de ella mirándola de reojo. ¿Por qué siempre sonreía? Parecía tonta.

Al llegar a casa, Ana se puso ropa más cómoda y fue al salón a esperar que le trajera la merienda. No pensaba ayudarla en nada. Cuál fue la sorpresa para ella cuando su hermana le preparó una bandeja con unos platos geniales. El sándwich de jamón y queso tenía forma de oso panda con los ojos hechos con aceitunas. El chocolate era diferente, tenía trocitos de otros sabores ¿De dónde lo habría sacado? Y el zumo de naranja tenía una pajita de color rosa.

¿Te gusta? -le preguntó Carmen con la bandeja entre las manos.

AAna no quiere una hermanitana no pudo ocultar su agrado y sonrió. Carmen se sintió más tranquila y entendió que la pequeña había disfrutado con sus detalles.

Después de merendar ,Carmen la ayudó a hacer sus deberes y lo hicieron mucho más rápido que otras veces, así que les quedó tiempo para ver una de las series favoritas de Ana. Después mamá llegaría hoy más tarde así que Carmen sacó un juego que tenía en su habitación de hace tiempo y le explicó a Ana las reglas.

Las dos jugaron y se divirtieron un montón. Cuando mamá llegó miro para ellas sorprendida, sobre todo al ver que Ana estaba en el cuarto de Carmen que hace mucho que ni lo pisaba y que se oían risas y no discusiones.

Cuando Ana se metió en la cama reflexionó sobre lo bien que se lo había pasado con su hermana. Y si Carmen es así de buena y simpática ¿No sería mejor en vez de tener envidia disfrutar de la mejor hermana del mundo? Ana se prometió que nunca más la trataría mal, ni escribiría todo lo malo que hace. Incluso pensaría copiarla para hacer las cosas bien y tener amigos como ella.
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